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Medvedev resurge a tiempo y se corona en París-Bercy

  • Pedro de Pablos García
  • 8 nov 2020
  • 4 Min. de lectura

Actualizado: 17 nov 2020

El número 5 del mundo doblega a Zverev en 3 sets para coronarse en París antes de afrontar la Copa de Maestros





Ambos jugadores comenzaron el partido desarrollando el juego que les caracteriza, metiendo una gran cantidad de primeros y jugando golpes muy planos que provocaban que el restador partiese con una gran desventaja de cara a hacer daño a su rival. De hecho, no fue hasta el séptimo juego con saque de Zverev que tuvieron el primer deuce del partido. Sin embargo, de nuevo una gran variedad con el servicio decantaron el juego para el alemán.



En poco más de media hora de partido el marcador ya reflejaba un 5-5 al que se había llegado con el mínimo desgaste, con puntos muy cortos y un gran porcentaje de primeros saques, por encima del 90% en ambos tenistas.


El marcador dejaba entrever que el primero que cometiese un error al saque lo iba a pagar cediendo el primer set, y ese error iba a llegar por parte del ruso. Con 6-5 al resto, Zverev iba a conseguir forzar intercambios más largos y con un gran passing shot de drive lograba ponerse 0-40 para tener 3 bolas de set. Tras salvar las 2 primeras, un error no forzado del ruso metía en el bolsillo de Zverev un primer set donde hubo 12 aces entre los dos, y un 94% y 91% de primeros saques respectivamente por parte de ambos, lo que provocó que no se viese una gran belleza en los puntos, pero sí mucha tensión.


El primer juego del segundo set mostró los primeros intercambios de gran calidad, con un Medvedev que se apoyaba en su solidez con derecha y revés para ir al ataque, mientras que Zverev enseñaba que, a pesar de ser un jugador muy alto, tiene una gran velocidad y capacidad defensiva, logrando salvar este primer juego de cada set tan importante en los partidos de tenis para liberar la presión.


Medvedev parecía un tanto acelerado en sus golpes, subiendo a la red e intentando acortar los puntos con su drive, ante la incomodidad que le generaba Zverev en los intercambios largos, donde se veía al alemán más entero. El ruso parecía fuera del partido, llegando incluso a parar un punto por una bola que creía que había sido larga, cuando entraba de manera bastante clara como bien mostraba el ojo de halcón a posteriori.


Los saques de Zverev se desarrollaban con gran comodidad hasta que una serie de despistes, con doble falta incluida, daban la primera bola de break para Medvedev. Sin embargo, un ace iba a poner de nuevo el deuce en el marcador. Se le atragantó ese juego al tenista germano, cometiendo 2 dobles faltas y perdiendo efectividad con el primero, pero supo sufrir para sumar el 2-1 tras más de 14 minutos de duración, cerrándolo con un puntazo en la red.


Zverev estaba mostrando una mentalidad que no se le veía hace medio año, justo lo que se le echa en cara en las grandes citas. En los momentos más duros del partido estaba haciendo gala de una gran inteligencia táctica y serenidad.


Como si fuese un calco del primer set, se iba a llegar al 3-3 con ambos jugadores usando su servicio como comodín, mientras que el desgaste empleado por Zverev para salvar su servicio en ese juego tan largo parecía comenzar a pagarlo en la velocidad de piernas, perdiendo efectividad en los intercambios largos, con demasiados errores no forzados.


Con 4-4 en el marcador, el cansancio en Zverev iba siendo cada vez mayor, mostrando grandes signos de fatiga y concediendo otra bola de break más con un 30-40 para Medvedev que estaba yendo de menos a más en el partido, y que esta vez sí iba a conseguir romper el saque de su rival por primera vez en el partido, lo que le colocaría con saque para cerrar el set.


El ruso se iba a mostrar muy sólido con el saque y la derecha en el juego decisivo del segundo set para cerrar por 6-4, mientras que se veía a un Zverev al que le costaba moverse de lado a lado de la pista y bastante cabizbajo de cara al tercero.


Este cansancio físico y mental iban a verse en el inicio del tercer set, cuando Medvedev continuó haciendo daño a su rival y le conseguía romper en blanco el servicio para ponerse 1-0 y saque, logrando esa consistencia que no había mostrado en el primer set. Ahora era Zverev el que sufría en los intercambios largos y el que intentaba acortar los puntos realizando alguna subida a la red.


Sin embargo, un momento de despiste iba a hacer que Zverev tuviese una bola de break tras una doble falta del ruso, que parecía volver a acelerarse pero salía del paso. Otras 2 bolas más de rotura dispondría un Zverev que, a pesar del cansancio, se iba aprovechando de los errores de su rival. Sin embargo, Medvedev conseguía salvarlas in extremis para acabar cerrando el juego y poner el 2-0 en el set definitivo, mostrando un gran repertorio con su derecha, en lo que fueron otros 10 minutos de juego.


De nuevo un juego tan largo iba a servir para que Zverev acabase de desfondarse por completo, concediendo otro break más que iba a poner a Medvedev con 3-0 y saque, mostrándose mucho más entero que su rival y poniendo pie y medio en el cetro de campeón en París.


El partido no iba a tener más historia en un tercer set que Medvedev cerró por un claro 6-1 para convertirse por primera vez en campeón del masters 1000 de París-Bercy tras vencer a su rival 5-7 6-4 6-1, lo que le da alas de cara a una Copa Masters de Londres en la que el año pasado no tuvo los resultados esperados.


Por su parte, Zverev tendrá que reponerse de un partido que mucho recordó al del US Open donde también se dejó remontar por Dominic Thiem. El alemán también estará en una Copa Masters en la que ya fue campeón hace 2 años y en la que buscará repetir título, jugando en una superficie y unas condiciones que son idóneas para su tenis.

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